En la localidad neuquina de Villa El Chocón, paleontólogo argentino Sebastián Apesteguía fue el que encabezó la investigación que derivó en el hallazgo de "Gualicho Shinyae", un nuevo dinosaurio carnívero que habitó en la Patagonia argentina.
Apesteguía lleva sobre sus espaldas más de 50 campañas de investigación en la Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, EE.UU., Francia y Hungría. Por si fuera poco, dio nombre a 25 nuevas especies fósiles de dinosaurios. Tiene 47 años y trabaja para la Universidad Nacional de La Plata.
"Una de las sorpresas del hallazgo es que no se trataba de un carcarodontosaurio, que son los dinosaurios carnívoros más característicos de esa época y de ese lugar y tampoco se trataba de un abelisáurido, que son los dinosaurios carnívoros sudamericanos por excelencia", afirmó el investigador.
Y agregó: "Esta nueva especie pertenece a los dinosaurios terópodos, por lo cual esta emparentado con las aves y eso nos hace imaginar que, muy probablemente, Gualicho tenía una cobertura de plumas".
“No hablamos de eslabones perdidos porque para eso habría que considerar a la evolución de las especies como una cadena. Lo que consideramos hoy en día es a la línea evolutiva como un arbusto ramificado y tridimensional, que es algo muy distinto a la idea de una cadena”, dice Apesteguía.
Entre las preguntas que se le hicieron a Sebastián Apesteguía:
¿Gualicho es más grande que un velociraptor?. "Sí, mucho más grande. Un velociraptor tiene el tamaño de un galgo".
¿Y Gualicho esta en esta cadena de dinosaurios carnívoros?. "A grandes rasgos sí, pero no está tan cerca de los velociraptores. En realidad los velociraptores se caracterizan por ser parte de un grupo que se llaman maniraptora , porque tienen unas manos enormes, con garras, y es justamente lo que NO pasa con Gualicho".
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